Le llamaron mientras estaba preparando un colacao. Contestó con voz bruswilis un "sídigame" profundo. Mientras le explicaban a través del teléfono, le ví descongestionar la cara, levantar las cejas y dulcificar la voz. Colgó, sopló y relajó los músculos.
Durante los vaivenes del columpio, leía su texto concentrado. Esa noche recitó sin despertarse 4 párrafos gritados con porrazos de vecinos.
Ayer, se levantó temprano, se compró la casa de sus sueños y me invitó a cenar perdices con patatas asadas sobre el tejado lunero. Durante la peli, jugamos a un trueque: "te cambio el paquete de pipas por un paquete de besos", acepté y nos cenamos. Dormimos horas descansadas y tranquilas con respiraciones profundas, y al despertar descubrimos que todo había sido real, tan real como un sueño.
4 comentarios:
Qué bien que la vida sea un sueño, qué bien que quieras despertarte... besosss
mírala que romántica ella... menos mal que no llovió, no? Un besuco, anda.
carlota! sabía que te ibas a meter conmigo! lo sabía! es que te conozco como si te hubiera parío! pues sí, hoy me he levantao ñoña! y qué! tú nunca te levantas ñoña? tú no dices nunca qué bonito día? o qué flores más bellas? tú nunca comes ferreroroché? es que tú nunca le pones una flor en la solapa a tu noviooo?? ..ejem.
Carmen, cariño, contigo no es. Es que mi prima, se mete conmigo y me vengo arriba.. Ya la cogeré.
la virgen con el amó
qinvidiaaaaaaaaaaaa
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